Un camino duro hacia la ciudadanía
Este informe es la traducción de una nota escrita por Kristin Collins, reportera del diario News & Observer de Raleigh:
Citizenship oath ends an ordeal
Alrededor de mil personas procedentes de 112 países se convirtieron ciudadanos estadounidenses el jueves como parte de la gran apertura del centro de convenciones de Raleigh.Para leer más acerca de la familia de Diáz y Campos en inglés, hagan click en este titular:
La planta baja del centro se convertió a una sala de justicia improvisada, y un juez federal guió a una multitud de gente a recitar el juramento de ciudadanía. Todas aquellas personas en el grupo habian pasado por un proceso difícil que tomó años y costó miles de dólares.
“Les felicitamos a cada uno de ustedes por pasar por una larga y dura jornada para convertirse en un ciudadano estadounidense”, dijo Jeffrey Sapko, representante del Servicio de Ciudadanía e Inmigración.
Entre los nuevos ciudadanos estuvo Daisy Diáz de Chapel Hill, con un sonrisa forzada. La oriunda de El Salvador logró su ciudadanía tras una lucha de 22 años en la cual su esposo, José Campos, fue deportado por agentes de inmigración en Charlotte y ella casi fue deportada.
Los oficiales de la oficina de inmigración permitieron a Campos, un padre con cinco hijos, a regresar después que los residentes de Chapel Hill le dieron su apoyo a la familia de él.
Ahora la familia tiene su propia casa en Chapel Hill y Campos se esfuerza para lograr la ciudadanía.
“Todo lo que pasamos”, dijo Diáz, “valió la pena”.
Citizenship oath ends an ordeal
Etiquetas: ciudadanía, inmigración, N.C., Raleigh
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home